09 julio 2010

DIARIO DE UN OCIOSO
Viernes, 09 de julio de 2010


Hace días que no hablo de libros. Últimamente he leído menos – largas partidas con la Dingoo tienen parte de la culpa, el calor y la pereza se llevan el resto – y los libros que han ocupado mi tiempo – “Elevación, elegancia y entusiasmo” de Francisco Casavella y “Contes” de John Cheever – requieren atención y tiempo. Tiempo que les he dado y les seguiré dando porque estoy disfrutando mucho de ambos.

Pero no quería hablar de los cuentos de Cheever ni de los artículos de Casavella. Quería hablar del otro libro que he leído durante estos días: “Amberville” de Tim Davys. Tim Davys, AmbervilleY es que “Amberville” es un libro curioso escrito por un autor desconocido que se oculta tras ese Tim Davys con el que firma el libro.
La portada es ya toda una declaración de intenciones: el “Nighthawks” de Edward Hopper convenientemente tuneado (ampliar la foto de la portada y veréis). Y lo que encuentras en el interior es precisamente lo que la portada te anuncia: novela negra pasada por el tamiz de Hollywood y protagonizada por animales de peluche.
El escenario no puede ser más cinematográfico: Amberville es uno de los cuatro barrios de Mollisan Town, una ciudad habitada por peluches que debe mucho al Toontown (Bujolandia en castellano) de los Dibus de “Quien engañó a Roger Rabbit”.
El escenario, el ritmo de la narración, los personajes estereotipados... todo nos lleva a un lenguaje más cinematográfico que literario... pero “Amberville” funciona. Se lee con facilidad y lo que en un principio pensaba que sería un lastre (personajes no humanos con actitudes humanas), resulta terriblemente atractivo. No es alta literatura, pero – pese a su sencillez - divierte y entretiene desmitificando los tópicos de la novela negra. Me ha gustado casi tanto como me ha sorprendido.

Os dejo el trailer de promoción del libro, otra curiosidad.

No hay comentarios: