12 enero 2008

LA PANXA DEL BISBE
c/Rabassa, 37
93 213 70 49


Siguiendo los consejos de Xavi y Encantadísimo nos acercamos a La Panxa del Bisbe, un pequeño restaurante que combina en su carta tapas y segundos platos. Pese a que no reservan mesas para dos personas y que el viernes todo suele estar a tope, nos atrevimos a ir sin reserva y tuvimos suerte.

El local es pequeño pero acogedor. Las mesas, quizás un poco juntas pero dadas las dimensiones del local es difícil que no fuera así. Madera en paredes y muebles, luz tenue y ambiente algo ruidoso (no hay música pero en una de las mesas hay un grupo de ocho que celebra un cumpleaños).

El primer detalle nos encanta: el agua es gratuita (tendrían que tomar nota muchos locales de la ciudad). Para picar nos ofrecen unas aceitunas muy picantes (genial para mí, mala suerte para María José).

La carta es corta, sobretodo en los segundos (cuatro opciones). Como María José no encuentra ningún segundo que le apetezca decidimos pedir cinco tapas y un segundo.
Para Beber acabaré renunciando al vino y continuaré con la Nostrum de San Miguel.
Empezamos con una tostada de bacalao ajoarriero (muy apetitosa) y unas alitas de pollo especiadas (deliciosas, nos dejan con ganas de comer muchas más. Para mí la mejor de las tapas que pedimos). Después llegan los mejillones picantes (que tras probar las aceitunas esperábamos explosivos pero que para decepción mía – y alegría de María José – no pican en absoluto. Pese a eso están muy buenos), raviolis de calabaza (correctos, pero quizá fue la tapa más floja), y las sardinas a la plancha con patata guisada (muy buenas las sardinas aunque el conjunto no me acabó de convencer).

El plato de cuello de cordero estaba delicioso. Meloso por dentro y crujiente por fuera. De acompañamiento un pisto de verduras con un suave aroma oriental. Buenísimo, lo mejor de la cena.

El pan (que no te cobran) debería mejorar ya que desmerece algo el conjunto.

La cuenta (tras los cafés) fue otra agradable sorpresa: 38’40 euros. La relación calidad precio me parece sensacional.

Pese a algunos despistes en el servicio (tuvimos que reclamar el segundo) y al ruido, La Panxa del Bisbe me gustó mucho y los aromas que me llegaban del menú de degustación (25 euros por persona) de la mesa de al lado (sobretodo el pescado y el foie) me dejaron con ganas de volver y probarlo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Celebro que t'agrades. I sobretot és el que comentes que la relació qualitat-preu és prou bona. Jo ja m'he cansat d'alguns d'aquests que pagues 100 euros entre dos i, a sobre, no menges bé. Xavi L.