09 noviembre 2003

DIARIO DE UN OCIOSO
Domingo, 9 de noviembre de 2003


María José me recoge en el trabajo y salimos con destino El Prat. Para llegar a casa de José María y Mónica seguimos al pie de la letra las instrucciones que nos mandó Mónica por mail. Por el camino nos encontramos a Nico (está trabajando y no nos podemos parar para hablar), dudamos en cada intersección y nos reímos mucho pero no nos perdemos.
Al llegar hay hambre y empezamos a cenar. Mónica se ha pasado medio día (es lo que dice pero yo creo que ha sido más) en la cocina y se nota. La cena es deliciosa y la acompañamos con un par de botellas de vino (impresionante un vino dulce, un Nadal 1510 – no estoy seguro del número -). No tengo ganas de copas y me apunto al cava. Caerán, a lo largo de la noche, tres botellas.
Risas, cava, más risas y fotos de viajes (Vietnam, su país vecino que rima con Montoya y Etiopía).
A las 6 llegamos a casa. Nos lo hemos pasado genial (gracias).

Domingo. Nos cuesta mucho levantarnos. María José compró cruasanes para desayunar. El café es imprescindible.
A la 1:30 tenemos comida familiar (Eli y Cesc han organizado una comida en su casa) y por la tarde tengo que trabajar (por fin es viernes).



No hay comentarios: